Ha sido una victoria trabajada hasta el último segundo del Dakar.
Cristina junto a su copiloto Pablo Moreno han logrado el éxito al volante de un Taurus T3 Max en la clase Lightweight Prototype Cross Country, más conocida como Challenger.
Ambos han conocido la noticia nada más llegar a cruzar la meta de la etapa final cuando les han comunicado que su rival para el título (Guthrie) seguía perdiendo tiempo y esa privilegiada posición.
En ediciones anteriores del Dakar, Gutiérrez había logrado victorias de etapa en la misma categoría y había luchado por las primeras posiciones en la clasificación general.
En esta ocasión, se enfrentó en una dura batalla con Mitchell Guthrie, compañero de equipo que, a su vez, en los últimos años había logrado resultados importantes.
Cristina se convierte en la segunda mujer en ganar la Dakar en una de sus categorías, escribiendo una nueva página en la historia del automovilismo con su firma única.
La primera en lograrlo fue Jutta Kleinschmidt, quien en 2001 ganó la categoría absoluta de Autos, navegada por su compatriota Andreas Schulz y al volante de un Mitsubishi Pajero.