

El Gran Premio de Japón 2025 marca el final de una era histórica: la asociación Honda–Red Bull, que ha cosechado cuatro títulos de pilotos y dos de constructores en apenas seis años, llega a su fin.
Una alianza que devolvió a Honda a la cima de la Fórmula 1, y que este fin de semana se despide frente a su afición.
“Estamos orgullosos de lo que hemos logrado en esta asociación”, comentó Koji Watanabe, presidente de Honda Racing. “Tener a Yuki Tsunoda compitiendo en casa con Red Bull hace que este momento sea aún más especial”.
El actual ciclo híbrido de motores V6 turbo de 1.6 litros no fue amable con Honda en sus inicios.
En su regreso a la F1 en 2015, su única cliente, McLaren, terminó rompiendo relaciones tras tres temporadas plagadas de problemas de fiabilidad y rendimiento.
“Nuestro equipo en Honda luchó mucho en esos primeros años”, recuerda Watanabe. “Era un reto completamente nuevo”.
Sin equipo cliente para 2018, Honda encontró refugio en Toro Rosso (hoy Racing Bulls). Ese mismo año demostró progreso, lo que convenció a Red Bull para sumarse como equipo principal en 2019. El resto, es historia.
En 2021, Max Verstappen le dio a Honda su primer título de pilotos desde Ayrton Senna en 1991.
Y aunque Honda anunció su salida oficial de la F1 ese mismo año, continuó suministrando unidades de potencia a Red Bull bajo la marca Honda Red Bull Powertrains, dominando la temporada 2023 con 21 victorias en 22 carreras.
A partir de 2026, Honda será proveedor exclusivo de motores para Aston Martin F1, que terminó quinto en 2024. El nuevo reglamento exigirá una unidad de potencia con una división 50/50 entre combustión interna y energía eléctrica, alineándose con la visión ecológica de la marca.
Watanabe asegura que el desarrollo del nuevo motor híbrido va según lo previsto: “La electrificación es clave para nosotros. Por eso seguimos apostando por la F1”.
El fichaje de Adrian Newey, uno de los diseñadores más exitosos de la historia de la F1, añade un enorme valor al proyecto. El británico, responsable de 12 campeonatos de constructores, trabajará en el coche de 2026.
“Es un honor volver a trabajar con Newey. Juntos, construiremos un monoplaza competitivo”, afirmó Watanabe.
Un nuevo desafío aparece: Aston Martin solo dispone de dos asientos, uno de ellos ocupado por Lance Stroll. Esto podría reducir las opciones para talentos como Yuki Tsunoda.
“Tendremos menos asientos, sí, pero seguiremos teniendo voz en la elección de pilotos para 2026 y más allá”, aclaró Watanabe.
Con algunos dirigentes de la F1 —como Mohammed Ben Sulayem, presidente de la FIA— planteando un posible regreso a los motores 100% térmicos con combustibles sostenibles, el futuro técnico de la categoría sigue abierto.
Honda, por ahora, mantiene su compromiso con la fórmula híbrida, y no emitió comentarios antes de la reunión de fabricantes prevista para el GP de Baréin.