Sainz: “Entiendo a Hamilton, cambiar de equipo no es fácil”
El propio Carlos Sainz ha reflexionado en profundidad sobre uno de los temas más comentados del arranque de la temporada de F1 2025: la dificultad que implica adaptarse a una nueva escudería.
El piloto madrileño, que este año corre para Williams, comprende a la perfección los desafíos que atraviesa Lewis Hamilton en su estreno con Ferrari.
“Los problemas que tiene Lewis no me sorprenden. Me los esperaba. Cuando llegas a un equipo nuevo y tu compañero conoce cada rincón del coche, igualarlo ya es un logro”, declaró Sainz en Miami.
Para el ex ferrarista, conocer a fondo un monoplaza no es algo que se consiga de inmediato. Todo lo contrario: implica tiempo, pruebas y errores constantes.
“Conocer bien un monoplaza lleva al menos seis meses, y si hablamos de explorar todas las variables, puede llevarte un año. Aun así, puedes rendir al 99%, y a veces ese 99% ya es muy competitivo”.
Sainz resalta que no se trata de excusas, sino de un proceso técnico y mental necesario para competir al máximo nivel: desde el estilo de conducción, hasta el lenguaje con los ingenieros y la comprensión de los elementos técnicos del coche.
Una adaptación que afecta a todos los niveles
Sainz apunta que la generación actual de monoplazas con efecto suelo ha incrementado la dificultad del proceso de adaptación, comparado con las F1 anteriores a 2022.
“Estas máquinas requieren un estilo de conducción muy específico. Antes podías ser rápido de varias formas. Hoy, si no conduces como el coche quiere, no vas a ser rápido”.
La exigencia del reglamento aerodinámico actual limita el margen para estilos de conducción alternativos, algo que también está afectando a Hamilton y a otros pilotos que cambiaron de equipo este año.
Sainz también subraya lo difícil que es ajustar cada detalle técnico: desde el uso del freno motor, pasando por el diferencial, hasta el comportamiento aerodinámico.
Cada equipo tiene su filosofía, y adaptarse a ella puede tomar decenas de sesiones de prueba.
“Estoy experimentando con el freno motor que usa Williams, que es muy distinto al de Ferrari. Pruebo distintos mapas, distintos ajustes del diferencial, distintas configuraciones mecánicas…”.
Esta fase de pruebas, asegura, es una parte que disfruta, a pesar de los errores:
“A veces fallas, pero cuando encuentras el ajuste correcto, es muy satisfactorio. Es ese clic que te dice: ‘ahora sí la entiendo’”.
Sainz también remarca que en un cambio de equipo no se parte de cero, sino por detrás, ya que tu compañero lleva años de ventaja con esa máquina. En su caso, es Alex Albon; en el de Hamilton, Charles Leclerc.
“No puedes llegar y ser más rápido que alguien que ya domina ese coche. En el mejor de los casos, puedes igualarlo, y eso ya es mucho”.