Checo Pérez mueve ficha para volver a la F1 con Alpine
Tras su abrupta salida de Red Bull en 2024, Sergio Pérez busca un regreso a la Fórmula 1. Alpine y Cadillac son las opciones más firmes que negocia su entorno.
Fuentes cercanas al entorno del piloto han confirmado que ya se han producido contactos con Flavio Briatore, asesor ejecutivo de Alpine. Aunque la escudería francesa evalúa a varios jóvenes de su cantera, no cierra la puerta a incorporar a un veterano con recorrido como Pérez.
Alpine estudia opciones para su futuro inmediato. En las próximas cinco carreras, Franco Colapinto sustituirá a Jack Doohan en el programa de pruebas del equipo.
Paul Aron, otro joven talento de la academia, también está en la órbita de los franceses. Sin embargo, el nombre de Pérez ha ganado fuerza por la experiencia que puede aportar a corto plazo.
Cadillac, la otra vía
Mientras tanto, Cadillac —el nuevo equipo que debutará en 2026— mantiene conversaciones avanzadas con el entorno de Checo.
La marca estadounidense ve en él una figura clave para liderar su estreno en la F1: con experiencia en equipos de media parrilla, victorias en su palmarés y un perfil técnico sólido, Pérez podría aportar estabilidad y desarrollo al proyecto.
Además, Cadillac valora su impacto comercial. Con una fuerte base de fans en América Latina y Estados Unidos, el piloto mexicano permitiría atraer patrocinadores y marcas nuevas, algo que en Red Bull tenía más restricciones por contratos cerrados.
Pérez ha declarado que solo volvería si encuentra un “proyecto que lo motive por completo”, con un equipo que “valore su carrera y experiencia”.
Desde su salida, ha estado con su familia en Guadalajara, pero continúa entrenando a diario, esperando la oportunidad adecuada.
Un regreso con condiciones
Carlos Slim Domit, su histórico patrocinador, sigue detrás del piloto.
El empresario mexicano acudió al Gran Premio de Miami, donde mantuvo reuniones para explorar opciones de futuro.
Incluso si Pérez no regresa, Slim y Briatore podrían colaborar para apoyar a Colapinto, aprovechando su creciente popularidad en Latinoamérica.
Esta relación comercial podría ser clave. Telmex, Telcel y Claro —marcas del grupo América Móvil que lidera Slim— tienen un largo historial de apoyo al automovilismo y podrían reforzar su presencia en Alpine si se concretara alguna alianza.
El caso de Pérez reabre el baile de nombres en el mercado de pilotos. A punto de cumplir 36 años en enero, el mexicano quiere un asiento competitivo cuanto antes. Alpine ofrece un rendimiento más inmediato; Cadillac, una promesa a medio plazo.
Por ahora, las conversaciones continúan. Y aunque nada está cerrado, Checo Pérez ya ha puesto su nombre sobre la mesa. El objetivo está claro: volver a la parrilla, pero solo si es para competir con ambición.