Williams se desinfla: solo 8 puntos en 5 Grandes Premios

La escudería Williams atraviesa su peor momento en lo que va de temporada 2025. Desde el Gran Premio de Mónaco, el equipo británico ha sumado únicamente 8 puntos, muy lejos de los 35 de Sauber o los 26 de Racing Bulls en ese mismo periodo.

Una caída drástica para una escudería que, hasta Imola, lideraba con claridad la zona media de la parrilla.

El bajón no se explica solo por la falta de evolución técnica, provocada por la decisión de centrar recursos en el reglamento de 2026, sino también por errores de ejecución y problemas de fiabilidad.

 

Desde Mónaco, Williams ha sufrido cuatro abandonos, incluyendo uno antes de la salida, y solo ha logrado puntuar en Canadá y Gran Bretaña. Todo ello, pese a que el rendimiento real del coche prometía más.

El FW47 había nacido como una propuesta equilibrada y competitiva en la mitad de parrilla, e incluso fue capaz de plantar cara a equipos punteros en Miami.

Pero mientras Haas resolvía su rebote crónico, Sauber implementaba mejoras clave y Aston Martin añadía carga aerodinámica, Williams quedaba congelada. Su temprana apuesta por 2026 —siendo uno de los primeros equipos en hacerlo— ha dejado la temporada actual en segundo plano.

Demasiados problemas

Carlos Sainz, que sigue adaptándose al comportamiento particular del FW47, ha sido víctima de varios errores estratégicos del muro, como en Miami e Imola. Alex Albon, por su parte, ha padecido los problemas de sobrecalentamiento que han condicionado más de una carrera.

El propio piloto anglotailandés ha reconocido que, aunque llegarán pequeñas actualizaciones, «tenemos que resolverlo esta misma temporada. Sobre todo, viendo los puntos que hemos perdido por estos fallos«.

En circuitos de alta temperatura, como Austria o Silverstone, la situación se ha agravado. La dificultad para mantener los neumáticos en su ventana óptima de uso, especialmente con las mezclas más blandas en clasificación, ha limitado mucho las opciones de rendimiento.

En Silverstone, una pista teóricamente favorable para Williams, solo la lluvia y unas buenas decisiones estratégicas permitieron salvar el fin de semana.

El mayor problema es que el resto de equipos sigue progresando. Y aunque la decisión de volcarse en 2026 puede ser acertada a medio plazo, el presente empieza a pasar factura. Ese quinto puesto en el Mundial de Constructores, que hace semanas parecía casi asegurado, está ahora en serio peligro.

El FW47 corre con el freno de mano echado, y los rivales no perdonan.

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