En la próxima reunión del Consejo Mundial de la FIA se discutirán las nuevas características de los coches oficiales de las primeras marcas del WRC a partir de 2027.
Se habla de coches menos caros en costes de producción, con motores derivados de los de Rally2 y menos aerodinámicos.
También se dará un nuevo espacio a los fabricantes de chasis en el Mundial WRC.
Tras tomar la decisión de acabar con los híbridos y los Rally1 en 2025, el WRC tendrá nuevas características para los coches participantes en 2027.
La base de esos nuevos modelos será la de los actuales Rally2.
El proyecto que debe aprobar la FIA indica que el motor y la aerodinámica se inspirarán en los actuales modelos que participan en WRC2, el ERC o campeonatos nacionales.
Se construirán sobre una carrocería de tipo tubular, lo que permitirá a las marcas que sus coches de competición puedan asemejarse a los modelos de serie que venden en segmentos como el B, el C o los SUV.
El techo de coste por coche deberá rondar los 350.000 euros, un precio muy similar al que caracterizó a los coches de referencia del Mundial de Rallies en el quinquenio 2012-2016. El peso, por su parte, tendrá que ser de 1.230 kilogramos.
La nueva normativa también debería permitir a los equipos clientes como Oreca y Prodrive fabricar sus propios chasis y venderlos.
Para ayudar aún más a los equipos a ahorrar dinero – y así hacer el Campeonato del Mundo más atractivo para los nuevos fabricantes – la FIA ha pensado en cambiar el reglamento con el objetivo de reducir el número de personal de equipo presente en los rallyes.
Se trata de un proyecto de reforma del WRC para intentar salvar la crisis económica que atraviesa el promotor del Campeonato del Mundo.